Como leíste antes en este capítulo, es importante usar la realidad en las relaciones públicas y saber el nivel de realidad del público al que te diriges.
Las encuestas lo logran.
En la terminología de las relaciones públicas, “encuestar” significa examinar con cuidado la opinión pública con respecto a una idea, un producto, un aspecto de la vida o cualquier otro tema. Al hacer un examen detallado (realizando encuestas de persona en persona), tabulando el porcentaje más alto de respuesta popular, se puede llegar a tener una visión completa de la opinión pública sobre un tema.
¿Pero qué significa esto para un individuo por sí mismo? Es seguro que no puedes apresurarte a contratar expertos en encuestas o a una compañía de investigación para que te digan todo acerca de los vecinos del nuevo barrio al que te acabas de mudar o lo que piensan los estudiantes de la clase o la opinión de tus compañeros de trabajo sobre tu proyecto.
El hecho es que una persona puede hacer sus propias encuestas con gran facilidad.
Una encuesta se lleva a cabo para encontrar qué botones tiene un grupo. En el tema de las encuestas, la palabra botón significa el tema, frase o concepto que comunica la realidad de un público específico. Es algo que es real para la mayoría de las personas de ese grupo y que se puede usar tanto para obtener una respuesta como para ganar su acuerdo. El término vino de la expresión inglesa de principios del siglo XX “oprime el botón” lo cual significa, en sentido figurado, “llevar a cabo una acción que automáticamente produce el estado de las circunstancias requerido”. En relaciones públicas la situación que se desea lograr es acuerdo y cooperación con las acciones propias.
En una encuesta, tu haces preguntas a la gente para obtener su opinión sobre algo. Un botón es el dato básico que consigues con esta acción. Es la contestación que se dio el mayor número de veces a tu pregunta de la encuesta. Con ese botón, tú obtendrás acuerdo y respuesta.
También se pueden planear encuestas para que te indiquen lo que la gente detesta.
Al conocer la realidad de un público, lo que se consigue a través de las encuestas, uno ha abierto la puerta para informarles de las ideas que quieres que acepten; en otras palabras, uno puede hacer que su mensaje llegue.
El mensaje es la comunicación, el pensamiento o el significado que quieres que llegue a una audiencia o público.
El botón se usa para lograr el acuerdo del público para escuchar el mensaje.
El mensaje y el botón no son lo mismo.
Al hacer una encuesta y encontrar el botón correcto, puedes entonces usar ese botón para obtener acuerdo y, de esta forma, obtener respuesta.
Para hacer una encuesta apropiada y entonces usar sus resultados con efectividad, se requiere comprender el propósito de las encuestas, del ARC y del triángulo ARC. Requiere una comprensión de lo que es la realidad.
Al llevar a cabo la encuesta, se usa el triángulo ARC inicialmente y, después, se aplica el triángulo ARC al utilizar los resultados de la encuesta.
Funciona de esta manera: uno se comunica con una audiencia o público (a través de una encuesta) con afinidad para averiguar cuál es la realidad de esa audiencia. La realidad es el acuerdo en cuanto a lo que es. La razón de que hagas una encuesta es para averiguar con qué estará de acuerdo esa audiencia o público.
Después, se aborda al público con esa realidad en un artículo promocional o con alguna otra comunicación para conseguir que el público esté de acuerdo en escuchar el mensaje. Y así se elevas la afinidad del público por el artículo que se estás promoviendo.
Es así de sencillo. Pero sólo será sencillo para la persona que comprende el triángulo ARC. Sin realidad o algún acuerdo, la comunicación no llegará y la afinidad estará ausente.
Por lo tanto, las encuestas se hacen para obtener acuerdo. Las encuestas no se hacen con ningún otro propósito. Se hacen para establecer acuerdo con una audiencia.
Le preguntas a diez personas o a mil, qué es lo que más querrían o esperarían de un neumático de automóvil, y siete o setecientos te dicen: “durabilidad”. Ese es el botón. Esa es la realidad; el punto de acuerdo sobre neumáticos de automóvil entre ese público. Así que usas ese botón con ese público y estableces la realidad; obtienes el acuerdo y, entonces, escucharán lo que tienes que decir sobre neumáticos de automóvil.
EJEMPLO DE ENCUESTA
Este es un ejemplo de una encuesta real. Un grupo de scientologists de Sudáfrica estaban interesados en averiguar la mejor forma de llegar a los niños en áreas rurales con un programa educativo que utilizaba la tecnología de estudio de
Las preguntas que se hicieron y las principales respuestas con sus porcentajes fueron:
1. ¿De quién tomas consejos?
73% Mis padres
13% Hermano o hermana
5% El maestro
2. ¿Cuál crees que es el mayor problema del mundo actual?
50% La violencia, la guerra
15% Nada, no hay problema
10% La educación
3. ¿Qué se podría hacer para cambiar eso?
23% Detenerlo
15% Nada, no hay problema
10% La educación
4. ¿Qué es lo que más te gustaría cambiar en tu vida?
25% La violencia, el odio
18% La situación, todo
15% La educación
5. ¿Qué es lo que va mejor en tu vida?
33% La educación
30% Nada
15% Todo
6. ¿Qué es lo que más esperas obtener en la vida?
58% La escuela, la educación
10% No lo sé
10% Todo, lo que sea
Los botones tienen su uso, pero no estamos tan interesados en ellos como en el mensaje. El mensaje es la esencia real de cualquier artículo de publicidad o comunicación de PR. Los botones sólo son el lubricante que se usa para hacer llegar tu mensaje.
Una encuesta como la del ejemplo anterior será de gran utilidad para llegar a los niños y darles las herramientas con las que puedan aprender y recibir una educación valiosa.
Los botones que se encontraron en la encuesta incluyen:
Padres: esos niños escuchan a sus padres.
Violencia, guerra: esto surgió como su mayor problema y como lo que más les gustaría cambiar.
La educación y la escuela fue el aspecto de sus vidas en que más tenían puestas sus esperanzas.
Después de llevar a cabo una encuesta de este tipo, este grupo pudo usar los resultados para lograr que su programa fuera mejor conocido y aceptado. Su mensaje básico es que existen métodos de educación funcionales y que les ayudaron. Al usar estos resultados de la encuesta, ellos pudieron expresar su mensaje de forma que se le aceptara mejor. Por ejemplo pudieron decir: “La educación es el camino hacia la paz y hacia una vida mejor para ti, y nuestro programa educativo te ayudará a obtener una educación valiosa”.
Cómo Llevar a Cabo una Encuesta
Las acciones relacionadas con hacer una encuesta son pocas y sencillas. Lo primero es establecer las preguntas que vas a hacerle al público para averiguar lo que se quiere y se necesita, lo que es popular o no lo es, o lo que sea.
Después de establecer las preguntas, se escriben o mecanografían en una hoja de papel en blanco para que el encuestador las consulte. Si estuvieras haciendo la encuesta en una ciudad donde se entrevistara a un gran número de personas, lo más práctico sería recurrir a los formularios de encuestas. Sin embargo, todo lo que se necesita para la mayoría de las encuestas es una tablilla con sujetapapeles con suficiente papel en blanco y varios bolígrafos (de manera que no cause una interrupción el quedarse sin tinta a mitad de la encuesta). La hoja con las preguntas de la encuesta se coloca entonces encima de las hojas en blanco y se levanta mientras se toman notas de la entrevista.
Para empezar una encuesta, simplemente te acercas a alguien y te presentas de forma amistosa (si es un extraño) y le preguntas si le puedes hacer una encuesta. Si la persona pide más información al respecto o el porqué de la encuesta, para qué se lleva a cabo, le contestas a sus preguntas e inicias la encuesta.
Hazle la primera pregunta, levanta la hoja de preguntas y anota la respuesta. Asegúrate de numerar las respuestas de forma que correspondan con el número de la pregunta que estás haciendo. No necesitas escribir todas las palabras tal y como la persona las dice, pero debes tomar nota de los puntos más importantes. Descubrirás que tras adquirir práctica haciendo encuestas, puedes escribir casi todo.
Después de que la persona haya respondido a la primera pregunta, dale las gracias y pasa a la siguiente pregunta.
Al final de la encuesta, le das las gracias a la persona. Es muy probable que en este punto sea la persona quien te lo esté agradeciendo a ti, ya que a la gente le encanta que le pidan su opinión. Y para muchas personas, que alguien las escuche atentamente es una experiencia rara y valiosa.
Luego acércate a la siguiente persona y repite el mismo procedimiento. Esto es todo en relación con el aspecto mecánico de la realización de encuestas.
La Tabulación de las Encuestas
Una vez que llevaste a cabo la encuesta, debes tabular las respuestas para que puedan utilizarse.
La palabra “tabular” se define como: “poner (hechos, estadísticas, etc.) en una tabla o en columnas; arreglar sistemáticamente”.
Al tabular las respuestas de la encuesta, dispones los datos reunidos sistemáticamente, para permitir el análisis de esos resultados. La definición de “análisis” se puede expresar como: “examinar en detalle para determinar la naturaleza o las tendencias de algo”.
El formato que se usa más comúnmente para tabulaciones de encuestas consiste en anotar cada pregunta, con las categorías de respuestas y sus porcentajes, ordenadas de mayor a menor porcentaje para cada pregunta.
Para llevar a cabo unas relaciones públicas que sean efectivas, que comuniquen el mensaje propio y que den a conocer bien las buenas obras propias, es esencial saber lo que los públicos de uno quieren o aceptarán, con qué estarán de acuerdo y en qué creerán.
Así, las encuestas le dan a uno la realidad de su público. Sin ellas, trabajarás a ciegas y al azar lo cual no te llevará muy lejos.
PROCEDIMIENTO PARA LA TABULACIÓN
1. Cuenta todas las encuestas.
2. Determina varias categorías de respuestas para cada pregunta anotando las respuestas brevemente, pero con exactitud, según vayas revisando las respuestas de la encuesta.
3. Cuando se hayan determinado las categorías, podrás simplemente poner una marca junto a la categoría apropiada, lo que significa una respuesta más de naturaleza similar.
4. Una vez que se hayan tabulado todas las respuestas, cuenta el número de respuestas en cada categoría para cada pregunta.
5. Calcula el porcentaje de cada categoría para cada pregunta. Esto se lleva a cabo dividiendo el número de respuestas en esa categoría entre el número total de encuestas y multiplicando el resultado por 100. Digamos que una pregunta tuvo 1,500 respuestas de naturaleza similar y el número total de encuestas es 2,500:
1,500 ÷ 2,500 = 0.6 x 100 = 60
Esto significa que el 60 por ciento dio ese tipo similar de respuesta.
6. El único error que puedes cometer es no darte cuenta de la semejanza de las respuestas y, así, tener una gran diversidad de categorías.
Scientology es una religión práctica que se relaciona con el estudio del conocimiento, y que a través de la aplicación de su tecnología puede producir cambios deseables en las condiciones de la vida. Fue desarrollada por L. Ronald Hubbard hace más de un tercio de siglo. El término Scientology se tomó de la palabra latina scio (saber, en el sentido más pleno de la palabra) y la palabra griega logos (estudio de). Scientology se define además como el estudio y manejo del espíritu en relación consigo mismo, los universos y otros seres vivos.