Hay tres factores en
En Scientology llamamos a estos tres factores el triángulo ARC. La abreviatura ARC (pronunciada A-R-C en vez de arc) es uno de los términos más útiles que se hayan ideado.
Se le denomina triángulo ARC porque tiene tres puntos relacionados. El primero es la afinidad. El segundo la realidad. El tercero de estos puntos y el más importante es la
Estos tres factores están relacionados. Por afinidad queremos decir “respuesta emocional”. Queremos decir el sentimiento de afecto o ausencia de él, el sentimiento de emoción o de emoción desagradable (emoción irracional o inapropiada) relacionada con la vida. Por realidad queremos decir los objetos sólidos, las cosas reales de la vida. Por comunicación queremos decir el intercambio de ideas entre dos terminales (personas que pueden recibir, transmitir o enviar comunicación). Sin afinidad no hay realidad ni comunicación. Sin realidad no hay afinidad ni comunicación. Sin comunicación no hay afinidad ni realidad.
La aplicación del triángulo ARC en las circunstancias que se encuentran en la vida diaria requiere de la comprensión de cada uno de los componentes del triángulo y de su interrelación.
Afinidad
El primer vértice del triángulo es la afinidad.
La definición básica de afinidad es la consideración de distancia, ya sea buena o mala. La función más elemental de la afinidad absoluta sería la capacidad de ocupar el mismo espacio que alguna otra cosa.
La palabra afinidad se emplea aquí para indicar amor, agrado o cualquier otra actitud emocional. En Scientology, se concibe que la afinidad es algo con muchas facetas. La afinidad es una cualidad variable. La palabra afinidad se usa aquí en el sentido general de “nivel de agrado”.
El hombre no sería hombre sin afinidad. Cada animal tiene algún grado de afinidad, pero el hombre es capaz de experimentar una cantidad especialmente enorme de afinidad. Mucho antes de que se organizara en ciudades, se había organizado en tribus y clanes. Pero antes de las tribus y los clanes, sin duda existían grupos. La necesidad instintiva del hombre de afinidad por sus semejantes ha sido reconocida desde hace tiempo, y la domesticación de animales muestra que esa afinidad la extiende a otras especies también. Se podría haber supuesto que la raza que desarrollase primero la afinidad en su grado más alto se transformaría en la raza dominante de cualquier planeta, y eso se ha corroborado.
Un niño está lleno de afinidad. No sólo tiene afinidad por su madre, por su padre, por sus hermanas y hermanos y por sus compañeros de juego, sino también por sus perros, sus gatos y los perros vagabundos que por casualidad pasan por ahí. Pero la afinidad va incluso más allá. Tú puedes tener un sentimiento de afinidad por ciertos objetos: “Me encanta el veteado de esa madera”. Hay un sentimiento de integridad con la tierra, los cielos azules, la lluvia, las represas de molino, las ruedas de las carretas y las ranas croadoras, que no es otra cosa que afinidad.
La afinidad nunca es identificación (llegar a ser uno con otra persona a través del sentimiento o interés) ni va tan lejos como la empatía (el poder o estado de imaginar ser otra persona e incluso compartir sus ideas o sentimientos). Tú, en muy buena medida, sigues siendo tú mismo cuando tienes afinidad por algo, pero además sientes la esencia de la cosa por la cual tienes afinidad. Tú sigues siendo quien eres y sin embargo te aproximas aun más al objeto por el que tienes afinidad. No es una cualidad que ate. No existen las ataduras cuando se produce la afinidad. Para el receptor, esto no conlleva deberes ni responsabilidades. Es algo puro, sencillo y natural y fluye del individuo tan simplemente como los rayos de luz fluyen del sol.
La afinidad engendra afinidad. Una persona dotada de esta cualidad, automáticamente encontrará personas a su alrededor en cualquier sitio que también comienzan a experimentar afinidad. Es una influencia tranquilizadora, cálida, alentadora en todos aquellos que son capaces de darla y de recibirla.
El nivel de afinidad entre individuos o grupos, se puede observar fácilmente. Por ejemplo, dos hombres que hablan entre ellos, tienen o no afinidad entre sí. Si no hay afinidad, discutirán. Si la tienen, tiene que haber allí otros dos elementos: deben haber llegado a un acuerdo en relación a una realidad y deben ser capaces de comunicarse esa realidad entre sí.
Esto nos lleva al siguiente vértice: la realidad.
Scientology es una religión práctica que se relaciona con el estudio del conocimiento, y que a través de la aplicación de su tecnología puede producir cambios deseables en las condiciones de la vida. Fue desarrollada por L. Ronald Hubbard hace más de un tercio de siglo. El término Scientology se tomó de la palabra latina scio (saber, en el sentido más pleno de la palabra) y la palabra griega logos (estudio de). Scientology se define además como el estudio y manejo del espíritu en relación consigo mismo, los universos y otros seres vivos.
un intercambio de ideas a través del espacio entre dos individuos.