TAREA >> 10. Lee “Ayuda de los Nervios”.

AYUDA DE LOS NERVIOS

Entre los muchos tipos de ayudas que hay en Scientology, hay una que puede enderezar las articulaciones y la espina dorsal.

Se llama Ayuda de los Nervios.

A menudo los ajustes de espalda que realizan los doctores quiroprácticos tienen éxito. Pero a veces la espina dorsal se descoloca y tiene que ajustarse una y otra vez. La Ayuda de los Nervios se desarrolló de hecho como un favor a los médicos quiroprácticos, muchos de los cuales la usan ahora.

En nuestra teoría, son los nervios los que hacen que los músculos estén tensos, los cuales mantienen entonces la espina dorsal descolocada.

Al haber un impacto, se inicia una oleada de energía a través de los conductos nerviosos.

Hay doce grandes nervios que bajan por la espina dorsal de la persona, que se extienden desde la espina pasando por ambos lados de los hombros y la espalda. Estos doce nervios se ramifican en conductos nerviosos más pequeños y terminaciones nerviosas. Los nervios afectan a los músculos, y si estos están continuamente tensos pueden descolocar la espina dorsal y otras partes de la estructura del cuerpo.

Los nervios conducen el choque de los impactos. Tal choque debería disiparse, pero raramente lo hace por completo. Los nervios dan órdenes a los músculos. Al haber un impacto, se inicia una oleada de energía a través de los conductos nerviosos. Entonces, y desde las pequeñas terminaciones de los conductos nerviosos, la ola de energía se da la vuelta y el resultado es una acumulación de energía que se para a la mitad del conducto. Esto produce lo que se llama una “onda estacionaria”. Simplemente se estaciona ahí sin ir a ningún sitio.

La Ayuda de los Nervios consiste en liberar suavemente las ondas estacionarias en los conductos nerviosos del cuerpo, mejorando la comunicación con el cuerpo y trayendo alivio para el ser espiritual.

Procedimiento

1. Haz que la persona descanse boca abajo en una cama o en una camilla. Entonces frota con tus dos dedos índices de arriba hacia abajo a ambos lados de la espina dorsal, más bien rápido, pero sin hacer mucha fuerza. Esta acción se repite entonces dos veces.

2. A continuación haz tu primera acción al revés, siguiendo los mismos conductos con tus dos dedos hacia arriba de la espina dorsal. Esto se hace tres veces.

3. Luego, con tus dedos extendidos como un abanico, frota los conductos nerviosos, usando ambas manos al mismo tiempo. Ve desde la espina dorsal hacia ambos lados del cuerpo siguiendo los conductos nerviosos tal como se representan en la ilustración superior izquierda abajo. Una vez que hayas abarcado toda la espalda de esta manera (trabajando desde la parte superior de la espina dorsal hasta la parte inferior de la misma), repite este paso dos veces más.

4. Luego invierte la dirección de forma que frotes hacia la espina dorsal.

5. Luego haz que la persona se dé la vuelta de manera que quede boca arriba. Usando ambas manos, continúa frotando siguiendo los conductos nerviosos alrededor de la parte frontal del cuerpo.

(Nota: Al seguir los conductos nerviosos alrededor de la parte frontal del cuerpo, llega sólo hasta los puntos que marcan las flechas en la ilustración superior derecha abajo. Los conductos nerviosos que nos interesan no se extienden a través del pecho o del abdomen, así que no pasamos por esas áreas).

6. Entonces invierte la dirección a lo largo de esos mismos conductos nerviosos.

(Nota: Al seguir los conductos nerviosos en el paso 6, comienza a frotar por los puntos indicados por las flechas en la ilustración superior derecha abajo, frotando hacia la espalda).

7. Ahora frota hacia abajo de los brazos y las piernas.

La persona está de nuevo vuelta boca abajo, descansando sobre su estómago, y comienzas de nuevo en el paso 1.

Este procedimiento se continúa hasta que la persona tiene una cognición o expresa algún alivio y tiene muy buenos indicadores. También puede experimentar que un hueso vuelva a su sitio, lo que viene acompañado por un sonido de chasquido sordo. En ese momento se debe acabar esa sesión de ayuda de los nervios.

La Ayuda de los Nervios se debe repetir diariamente hasta que todas las ondas estacionarias se hayan liberado.

Frota a lo largo de los conductos nerviosos que parten de la espina dorsal, hacia la parte frontal del cuerpo.
Cuando la persona esté boca arriba, frota sólo hasta donde muestran las flechas.
1. Comienza la ayuda de los nervios frotando hacia abajo a ambos lados de la espina dorsal con dos dedos.
2. A continuación frota hacia arriba de la espina dorsal en la dirección opuesta.
3. Frota hacia afuera de la espina dorsal con los dedos abiertos en forma de abanico.
4. De nuevo invierte la dirección y frota de vuelta hacia la espina dorsal.
5. Con la persona boca arriba, sigue los conductos nerviosos alrededor de la parte frontal del cuerpo y entonces invierte de nuevo la dirección.
6. Frota hacia abajo los brazos y las piernas. Entonces da la vuelta a la persona y comienza de nuevo, frotando hacia abajo de la espina dorsal.
Al liberar ondas estacionarias, una ayuda de los nervios puede restaurar la comunicación entre el thetán y el cuerpo, relajar los músculos y enderezar la espina dorsal y las articulaciones.

los médicos que realizan quiropraxis, un sistema de curación basado en la teoría de que la enfermedad proviene de una función anormal de los nervios y que utiliza el tratamiento por medio del manejo y ajuste de estructuras del cuerpo (como la columna vertebral) y utiliza terapia física cuando se necesita para restaurar la alineación correcta.